Hay que ser imbécil

Quiero pensar que han querido ser graciosos. Quiero pensar que no van por la vida así. Que no han querido decir lo que parece que dicen. Lo que dicen. Quiero pensar, quiero creer. Pero es que luego voy, lo releo y me entra tal indignación que me dan ganas de tirarme al monte con una recortada y que salga el sol por Antequera. 

En serio, señores de GQ, revista de tendencias masculinas (vete a saber lo que será eso), en serio, ¿las mujeres no soportamos 'Juego de Tronos' porque los nombres de las ciudades son muy extraños? ¿EN SERIO? ¿Qué pasa? ¿Que si nos sacan de cosas sencillitas tipo Madrid o Barcelona ya, uuf, nos perdemos? 

¿En serio, dicen ustedes en serio que las mujeres nos dormimos con 'Juego de Tronos' porque hay muchos personajes con nombres raros? Claro, no nos da el cerebro para retener cosas como Daenerys Targaryen o Cersei Lannister. Nuestro cerebro, de mujeres, ya se sabe. Para tanto no da. CLARO. 

Y, en serio, nos aburre mucho la cantinela de 'Winter is coming'. Como nunca llega el invierno, pues nos cansamos y nos vamos a dormir. O a pintarnos las uñas. Evidentemente. 

Disculpadme, que me voy a vomitar un rato. 

Que cosas como ésta se puedan leer aún en revistas se supone que serias, me parece tan deplorable, me da tanto asco, me enfada tanto, que me gustaría pillar por banda al imbécil que lo ha escrito y hacerle un recorrido por toda mi vida. Desde aquella niña que lo único que quería era un barco pirata de regalo de Reyes, pero a la que regalaban insistentemente Nenucos, de los que pasaba para irse a jugar con el primer scalextric que tenía cerca, hasta ésta de ahora que considera a los Stark parte de su familia, que muere por Jon Snow y que llora cada vez que los rohirrim llegan al abismo de Helm, por citar otra de esas sagas, claro, que a las chicas nos tiene que aburrir, porque, uuf, qué feos son los orcos, ¿no?

Por no añadir, que yo no puedo soportar a la otra serie de la que hablan, serie, esta vez, femenina. Se supone. Serie que los chicos, claro, no aguantan. Se supone también. 'Girls', la serie revelación de la HBO, que ya es de culto y que yo, ya lo digo, no aguanto. Sí, femenina, pero no me gusta. ¿Qué pasa? Lo intenté y me pareció graciosa a ratos, con algún momento bueno -Dancing on my own, sí-, pero que para mí no era. Y ya está, no pasa nada. 

Y conozco chicos a los que 'Girls' les flipa, por si hace falta decirlo. Y, por si hace falta decirlo también, a mí me encantaba 'Sexo en Nueva York'. Y me gusta 'Juego de Tronos'. Al mismo tiempo. Qué locura. Sí, sí, he leído los librazos de George R. R. Martin con devoción y adicción, pero cuando puedo le echo un vistazo al Hola, me pinto las uñas de colores y mis ovarios adquieren vida propia al ver a Michael Fassbender. Todo, a la vez. Pero es que podría no ser así. Podría ser diferente, gustarme otras cosas, podría ser super mega femenina y, aún así no sentirme identificada al 100% con 'Girls' y, sí,  no entender ni papa de los líos de Westeros, pero podría adorar a Harry Potter, o no, podría no gustarme, pero encantarme Star Wars y podría, podría.... ¿lo comprenden, señores de GQ? ¿Comprenden que hay tantos gustos como PERSONAS? ¿Comprenden que somos PERSONAS antes que hombres y mujeres? ¿Que con artículos como ese sólo fomentan el eterno machismo de 'Soberano, es cosa de hombres', reconvertido ahora en 'El Muro, es cosa de norteños'? 

Lo dicho. Hay que ser imbécil. 

(No enlazo el artículo porque no me da la gana hacerle más publicidad, pero es fácil de encontrar)