El curriculum friki

Pensaba anoche mientras intentaba situarme en las (muchas) historias de A feast for crows en todas esas cosas que todos sabemos hacer, o en esas capacidades que tenemos, y que no se valoran, ni siquiera se preguntan, en el mercado laboral. Esa vida oculta que todos, o casi todos, llevamos y de la que no puedes hablar mucho 'en alto' si no quieres que te miren como a un bicho raro. Porque leer las 50 sombras pedorras esas está bien visto y es normal, sí, pero emocionarte cada vez que te mencionan a Van Gogh porque te acuerdas del -maravilloso- capítulo que le dedicaron en DW, es de raros. Ya veis.

En fin, ahora que hay curriculums de todo tipo, cada uno más loco que el siguiente, colores, formas, dibujos, vídeos... que todo es una competición por ver quién es el más original, el más creativo... ¿por qué no? ¿Qué se puede perder? 

Pues ahí voy. A ser original, a no esconder nada. Vayamos a esa parte del CV donde tienes que poner eso tan de moda ahora, las capacidades o strenghts, que dirían en inglés. Fácil:

- Amplia capacidad intelectual. ¿Prueba? Leo un capítulo al azar de ASOIAF y puedo situarme en la historia  perfectamente. De verdad de la buena. También a veces hasta le encuentro sentido a las paradojas tiempo-espacio de Moffat. Lo juro por Gallifrey. 

- Empatía e inteligencia emocional en buenos niveles. ¿Prueba? Pese a la devastación de los Stark, no me dio por matar leones ni nada por el estilo. Incluso Jaime Lannister hace que mi devoción norteña se tambalee a ratos, aunque sigo firme en mi amor por Jon Snow, lo que prueba que soy fiel.

- Me adapto bien a los cambios. He asumido perfectamente y sin desequilibrios mentales de importancia dos regeneraciones del Doctor. Y si me preguntas a quién quiero más, Eccleston, Tennant o Smith, me pondrías en un aprieto. 

- Tengo conocimientos científicos avalados por el doctor Sheldon Cooper. Ahí es nada. 

Y podría seguir y seguir...  ¡Por un mundo en el que las freak-strenghts sean importantes!