De verdad, que yo para esto no estaba lista. Con el día que tuve ayer. Qué nervios, qué histeria, qué emoción. Esas cosas que sólo los frikis muy frikis podemos comprender. Porque yo, que tengo lo mío de pragmática, me miraba a ratos así desde fuera y me decía: pero Lya, hija, a tus años, así, con algo así, qué haces aquí, un domingo por la tarde aislada del mundo, pendiente de una conexión pirata a la BBC, ¿tú te lo has hecho mirar? Pero nada, eso me lo decía, pero mi otro yo menos pragmático, ese que está como una regadera, acallaba a mi Rottenmeier interior de un manotazo para seguir soltando suspiritos cada vez que la BBC daba muestra de que existía vida en Londres más allá de las carreras de bicis. Porque qué día, oiga, con las dichosas carreras de bicis. Entre eso, el debate de por la mañana sobre discriminación en el que intervino, entre otros, una chica muy mona que resultó ser, ante mi castellana sorpresa, una reverenda (ahí descubrí que el alzacuellos que llevaba no era una nueva moda londinense, no), las misas de por la tarde con sus cantos y sus gorgoritos y el programa de su Frank de la Jungla, eché el día pendiente de la BBC. Yo y otros tantos miles por esos mundos, no vayáis a pensar.
Que anunciaron al nuevo Doctor. Y nos lo pasamos todos pipa. Porque de esto se trata, de jugar a ese juego que la BBC traza tan bien. Y encantados. BBC, aquí una esclava, una sierva, lo que quieran.
Lo que pasa es que entre los tuits histéricos que iban y venían, pude darme cuenta de otro maremoto que recorría Twitter. Maremoto de demagogia. El de Gibraltar. Que aún sigue.
Por partes:
1- Gibraltar como lugar mola mil. Soy fan de su rollo ochentero, de su aspecto de nido de piratas y espías (lo que es), de sus vistas, sus monos y, sobre todo, de sus colonias y perfumes a 25 libras. Esto ha quedado muy frívolo, pero tenía que decirlo.
2- Los británicos son unos hijos de la Gran Bretaña que no pierden oportunidad de tocar las narices con el tema. Porque ellos son así de subiditos y ególatras. Porque para ellos su imperio aún existe. Porque son unos piratas herejes. Porque viven de lujo en España, con los negocietes asentados en Gibraltar.
3- Ante el constante toque de narices de los milores llanitos (en esta ocasión, hormigón para jorobar a los pescadores), los españolitos tenemos dos opciones:
a) Sonreír, poner buena cara, pensar que no es para tanto, ir de buenos, pensando que así les vamos a dar pena y se van a portar bien. Ja. Son piratas, no se van a portar bien. Nos la llevan jugando desde hace siglos y así va a seguir.
b) Hacernos los quijotes. Tocar las narices nosotros también. Sacar el poco orgullo que nos queda. Amenazar con meter mano en el nido de culebras que es Gibraltar. Y esto es, parece ser, lo que ha decidido hacer el Gobierno. Y la gente se ha soliviantado, al menos por tuiter, con el rollo de que es una maniobra para distraer a la opinión pública. Y no digo yo que no lo sea, pero prefiero una maniobra así que que pongan partidos de la selección. Al menos, hacemos algo por reivindicarnos. Lo que pasa es que, como todo en esta pena de país, el tema Gibraltar está muy politizado e ideologilizado. Las ideologías, la gran lacra de estas Españas nuestras. Qué asco. Ya quisiera yo para nosotros esa defensa y ese orgullo de su país, su nación y su historia alejada de cualquier ideología que tienen los brit. Ya quisiera.
En fin, soltado el rollo, añado que menos mal que ha venido hoy Juan Manuel de Prada a hacerme reír con un artículo muy sesudo sobre Juego de Tronos. Angelico mío. Que dice que no lo entiende. Que no entiende la serie, porque a los libros parece que ni se ha acercado.
Y, a ver, está en su derecho de decir que no le gusta o que no lo entiende, pero generalizar como generaliza afirmando que a los fans de la serie nos pasa lo mismo pero no lo reconocemos, pues no, eh, eso no. Yo entiendo perfectamente las historias de Westeros. Una cosa es que me pierda, que me pierdo a veces, en los libros con la cantidad de nombres, familias y escudos que hay, y otra es que no lo entienda.
Porque, oiga, tampoco estamos hablando de la teoría de los agujeros negros de Hawking. Lo de Juego de Tronos es Edad Media fantástica, guerras, amoríos y familias rivales. Lo de toda la vida, vamos. Nada elevado ni complicado. ¿Qué hay que entender en una historia así? Si el señor De Prada afirma que no entiende Juego de Tronos, deduzco que tampoco comprende la Guerra de las Rosas inglesa, en la que las historias de ASOIAF se inspiran.
Por cierto, estupendos los últimos documentales BBC sobre the War of the Roses. Sí, son unos egocéntricos piratas toca-narices, pero lo asumo: soy su fan. Nobody is perfect.
El Doctah me comprende |
El nuevo Doctor es lo mejor y la War of the Roses lo segundo mejor :D
ResponderEliminarLos docus de la BBC son recomendables 100%, te los aconsejo.
EliminarGracias Lya! Me he visto muchos y aun sigo viendo más, ya que es de mis épocas preferidas de la historia de Inglaterra :)
EliminarMis dos neuronas no me permiten comentar sobre todo lo de tu artículo, compréndelo. Pero aún con dos neuronas que hagan contacto entre sí soy capaz de entender Juego de Tronos. Y tal. Pero bueno, ya lo decía yo ayer. El día que me tome en serio algo de lo que diga de Prada, estaré tocando fondo. Más.
ResponderEliminarMenos mal que no soy yo sola... porque es que no puedo con él... xD
EliminarNo sé quien es el hombre este que dices xDDDD
ResponderEliminarpero vamos, yo que llevo la mitad de la 2a temporada de Juego de Tronos... entender se entiende xD Claro que hay misterios y líos que hay que ir descubriendo a medida que avanza la historia, pero como toda serie o libro no? Sino que gracia tiene? xDDDDD
Lo del Doctor ya lo fui leyendo de ti xD pero de Gibraltar no lo vi. La verdad es que yo no tengo nada de idea de lo que pasa ahí xDD Eso me pasa por leer poco e__e
Ay Lya, mi alma gemela whovian, me ha encantado todo lo que has dicho, realmente, pero en lo de Gibraltar no coincido. Llámame historiadora falsa anclada en el pasado, pero que lo que Utrech dijo, que no lo separe el hombre.
ResponderEliminarO sea, básicamente, que estos rollos geopolíticos me aburren. Pero sí, mejor sacar el orgullo patrio por algo nacionalista que por un partido de fútbol.
Ah, y respecto a Capaldi, te entiendo. Mi madre diciendo que parece que no tengo 20 años si no 5... ay, menos mal que no me va a ver en Londres cuando vaya a lo de Harry Potter...
A mí me parece perfecto que Gibraltar sea británico, pero hasta ahí. Que no toquen las narices con el asunto...xDD
EliminarAy, lo de Harry Potter lo tengo yo pendiente para la próxima!