Agenda de la semana, bis (EL INGLÉS)

Las prisas, que son muy malas. Y la edad, una puñeta. 

Otra labor realizada la pasada, ya, semana fue explicarle a un inglés del interior que sí, que los toros de Osborne que ha contemplado por nuestras carreteras están protegidos y no se pueden quitar. Que nosotros, sus alumnos, no seremos, así en general, muy partidarios del tema taurino, pero los toros esos ni tocarlos. "Como el tío Pepe de la puerta del Sol", soltó alguien, no sé quién, ehem, en plena discusión con el hijo de la Gran Bretaña, al que no le entraba en la cabeza el asunto. 

Tan difícil no es, ¿no? Pues el muchacho no lo pillaba. O sí, pero ponía cara de guiri explorador. Como si estuviera descubriendo una tribu perdida en la selva africana. Y por si no ha quedado claro: nosotros éramos la tribu, claro. 

En fin, una anécdota más de mis días con el inglés que ya llegan a su fin. 

Nótese la pena y el dolor que nos atenaza. 

El caso es que deberíamos haber acabado ya hace días, pero los jaleos aquellos que tuvimos en noviembre con profesora que viene, profesora que se va y tal, han hecho que nos deban horas de clase por un tubo. Y como son así de legales, las recuperamos sí o sí. Aunque los alumnos hayamos dicho que, de verdad, en serio, no hacía falta que se tomaran la molestia, que ya nos sacrificábamos y eso, que nos iba a costar, eh, nos iba a costar, ehem, pero que superaríamos tener menos horas lectivas de las correspondientes, que firmábamos dónde hiciera falta, que nos aguantábamos las ganas de dar más y más horas y horas de ejercicios y gramática y vocabulario y listenings, pero, the mother who gave birth them, no ha habido forma. 

Si total, lo mismo nos va a dar. Entre que acabamos las clases y llegan los exámenes, va a pasar un mes. Exacto. Un mes con su primavera, su solecito y su cielo azul. Ergo, va a estudiar Rita. 

Bueno, a lo mejor ni ella. Este año no me voy a agobiar, lo he prometido así a la humanidad. No. Nada de agobios, ni voy a suspender, ni responder a cualquier comentario con un "no sé, pero, por cierto, ¿te he dicho que tengo examen de inglés?, ¿pero de inglés del C1?, ¿TE LO HE DICHO?". No. Este año voy a ser normal. En serio. De verdad. 

¿NERVIOSA YO? No sé qué os hace pensar eso...